Llegas vivo al pueblo de purito milagro y, lo de siempre, el pueblo está en la cima del monte. Es realmente bonito, todo es un laberinto de estrechas callejuelas medievales. Lo malo es que no tienes vistas porque ninguna calle tiene mirador al exterior y tú subes y subes esperando llegar a la "azotea" porque la panorámica debe ser espectacular.
Cuando ya no queda pueblo que subir ves las ruinas de un castillo culminando la montaña, pero un torno te impide el paso: "Jardín Exótico". Consiste en unos cactus que han puesto para justificar que tengas que pagar 5 euros para acceder a la cima, qué jodíos. Las vistas impresionantes: a un lado los primeros macizos de los Alpes, al otro el Mediterráneo. Por lo visto, por aquí Alfred Hitchcockt rodó varias series con Grace Kelly y Cary Grant, y aquí han vivido (no al mismo tiempo) Guillermo de Suecia, Romy Schneider, Alain Delon, y Bono (de U2).
Por culpa de otro "famosete" que vivió aquí largas temporadas me metí en un jardín...agreste: Sendero de Nietzsche. Leo en una placa que por estos caminos, este filósofo tan simpático, se inspiraba para escribir "Así habló Zaratustra" (peligrosa lectura para un adolescente que me obligaron leer en el insti allá por el siglo pasado y que, en su momento, me provocó cierto desasosiego existencial). Tras los pasos de Nietzsche me adentro en el sendero no sin antes informarme de que por él llegaré hasta la estación de tren en el mar, en una hora aproximadamente. Una hora de bajada continua zigzagueando por la montaña. A veces el desnivel es tan fuerte que en algunos tramos facilitan la bajada con escalones (obra,supongo, de la Escuela Taller). En todo el recorrido solo me encuentro con un senderista... y subiendo. Suda como una fuente y trae un cinturón cargado de botellitas de diferentes colores, pero como viene vestido de deportista profesional supongo que está probando todos los productos dopantes del mercado en vez de suponer que es un palestino a punto de inmolarse. La caminata chulísima pero te deja las rodillas tocadas de tanta bajada. Ahora me explico la mala leche de Nietszche.
Llego a Niza y dejo la gorra en el tren. Me meto en una tienda "cualquiera" y veo con estupor, casi con miedo, que existen personas dispuestas a pagar 92 € por una gorra. Salgo casi aterrado de aquel sitio (como si intuyese que están a punto de echarme) y me meto en unas galerias más convencionales. Y sí, había españoles por aquí, no los habíamos visto porque estaban de tiendas.
Forman parte de este viaje:
Haces complementaria o esta excursión me sale gratis.
ResponderEliminarSi quieres te mando una gorra, pues aquí hay muchas y gratis. Besos
ResponderEliminarChulísimo, Tú disfrutas... y nosotros tb. Aprovecha todo y más porque nos merecemos los buenos momentos. Hoy es uno de esos dias que tengo claro que la vida es un tango y hay que bailarla, tu eres ejemplo. ¡CUIDATE! TKM (como se dice en el tuenti ese).
ResponderEliminarAHHH, RECUÉRDALE AL PERSONAL QUE HOY HACE UN AÑO QUE TU ERES, YO SOY ESPAÑOL, ESPAÑOL!!!!
ResponderEliminarNo envíes gorra Gille, la encontré por 8 euros.
ResponderEliminarMapi, dirás que tú has bailao poco, no te digo.
En clase saqué el tema pero mis compas son más de hípica que de fútbol.
BSS.