La línea 6 del metro de Budapest es la que vas a coger para llegar a la estación de trenes de Deli. Allí espero que encuentres al chaval que nos ayudó a coger los billetes a Siofok porque mira que las cosas han mejorado desde que estuve por aquí hace un montón de años, pero el húngaro sigue sin evolucionar: no hay quien lo entienda.
Menos mal que en Siofok todo está escrito también en alemán, hecho que a ti te facilitaría tanto las cosas como a mí.
Menos mal que en Siofok todo está escrito también en alemán, hecho que a ti te facilitaría tanto las cosas como a mí.
Tampoco entenderás el cartelito en un caserón abandonado que debía ser tu hotel, pero a "se vende" es la suposición más razonable. Sí, ríete, no tenemos alojamiento. Espero que Booking me calle la boca con una indemnización millonaria para quitar este párrafo y evitar que los millones de lectores de este blog se enteren de que alquilan alojamientos que no existen y te hacen buscar habitación un sábado de julio en el lugar más turístico del país.