lunes, 30 de diciembre de 2019

Egipto III, El Cairo

Si la bacteria del Nilo se manifiesta en el vuelo de Luxor a El Cairo no se te van a hacer corto los 50 minutos de trayecto en avión. Y menos casi las dos horas entre el aeropuerto y el hotel. Sí, dos horas  de retenciones y bocinazos en esta megaurbe de 22 millones de almas, sin apenas semáforos.

Podría seguir por lo escatológico porque el final no tiene desperdicio (bueno sí, muchos) pero voy a ser considerado y te voy a llevar a las Pirámides de Giza  para que veas que la estupidez humana viene de lejos. Claro que la culpa la tienen los dioses que les tenían sorbiditos el cerebro a todo el personal y obligaban a  enterrarse con su ajuar funerario para abrir la última puerta que les llevaría a la eternidad, y, claro, en un nicho solo cabe calderilla. Quizás algún faraón hubiese preferido incineración, pero como los tanatorios de la época no ofertaban tal posibilidad los pobres faraones tuvieron que hacerse estas pirámides y guardar en ellas todos sus tesoros para que después la saquearan.


Ahora los que saquean son los camelleros. Nos cuenta el guía que llegas a un acuerdo tras mucho regateo, luego te piden el doble, si no se lo das no te bajan del camello. Otros testimonios de algún compa de expedición son incluso más escabrosos incluyendo mini secuestro expres dirección al desierto si no le das lo que te piden. Huye de los camelleros, por tu bien te lo digo.

Las pirámides estaban revestidas por granito rosado, pero los cariotas lo han ido cogiendo a lo largo de los siglos para alicatar sus baños o ponerse la encimera. Ay, si  Keops, Kefrén y Micerino levantaran la cabeza !! Las pirámides son tan majestuosas como te esperabas, lo que no te esperabas en que la Gran Esfinge se hizo porque había una roca enorme que tapaba una de las pirámides, así que a lo tonto a lo tonto se fue esculpiendo y salió un león con cabeza humana, hasta que llegó Napoleón y de un cañonazo le reventó la nariz. Lo juro. Resulta que las esfinges toman vida por la noche para defender la tumba de los faraones y por eso la peli de "Noche en el Museo" está basada en hechos reales. Y no me discutas.

Antes de comer pásate por una tienda de papiro para alucinar con su elaboración artesanal y con sus precios cósmicos. Anda, tira p'al hotel y luego ya, como tienes tarde libre, pillas uber y en un momento estás en el centro de la ciudad. Quien dice un momento dice dos horas. Cansados de no avanzar entre el caótico tráfico  te bajas en cualquier sitio, que resulta ser la Plaza Tahrir, famosa por la   primavera árabe. Intenta cruzar una calle y comprenderás enseguida por qué la  esperanza de vida egipcia es tan cortita. Ya de vuelta en el hotel alguien que compartió barco con nosotros se nos acerca para confesarnos que no nos reconocía vestido de occidentales, que solo nos conocía por la tele del barco y pensó que formábamos parte del circo para entretener al turista, allí con nuestras chilabas y nuestros bailes...pues no, resulta que no, que también somos guiris aterrados con el tráfico cariota.

La inolvidable salida por nuestra cuenta nos  lleva a reconsiderar que la mejor opción para ver la ciudad es la de unirte al resto del grupo y a Nasser. Así que atraviesa Ciudad de los Muertos, con sus  majestuosos panteones para la vida eterna, rodeada de la más absoluta miseria para la vida real. Y, sin despeinarte ni nada, ya estás en la Ciudadela de Saladino, recinto que recoge varios edificios imponentes, destacando la Mezquita de Alabastro.

Aparte de majestuosa, desde la Ciudadela tendrás unas impresionantes vistas de la ciudad envuelta en polvo: hace un viento del carajo y alguien se ha dejado abierta las puertas del desierto, espero que no dejaras ropa tendida.

La siguiente parada en el  Barrio Copto, chiquito pero bien chulo. Muy vigilado por motivo de seguridad. Ya sabes que los Coptos son los cristianos que viven por estas tierras, que son minoría sí, pero son el 20% de la población total de Egipto. Obviamente no viven en el barrio copto sino en convivencia pacífica con los 80 millones de musulmanes. Seguramente has cogido ya la calculadora del móvil...sí, 100 millones en total, genio que eres un genio. Anda, mira la iglesia copta, una de las más antiguas de la cristiandad.


Una vueltecita por el gran zoco, el bazar de Jan El-Jalili para comprobar aliviado que el ambiente es menos bélico que el que provocaban los vendedores de Luxor y Asuán. Y llegas al Museo de El Cairo. Extraordinario por los tesoros que alberga y por lo descuidado que parece, bien es cierto que están de mudanza: en breve abrirán el nuevo museo de El Cairo que ya está en pie y que tiene bastante mejor pinta que el edificio actual. Una planta enterita para el Tesoro de Tutankamón, sacado del Valle de los Reyes. Prohibido echar fotos al sarcófago de Tutankamon y a la máscara (no por motivo de conservación, sino porque te hacen ellos la foto para cobrártela), así que no le digas a nadie que las has visto en este blog.  Nos queda un día por nuestra cuenta, a ver en qué lo invertimos.

Pues lo invertimos en dos coches que nos llevan a Saqqara, necrópolis de la antigua capital del Imperio Antiguo. Así que estamos ante las pirámides más antiguas y la primera de gran dimensión:  la Pirámide Escalonada, a la que se puede entrar dentro sin suplemento, por lo que te puedes ahorrar las 400 libras de entrar en el interior de la de Keops. Hay otras pirámides prácticamente en ruinas,  que dan aspecto de escombreras, o lo mismo son escombreras en forma piramidal, vete tú a saber porque hoy vamos al buen tuntún, sin guía que nos guíe ni autobús que nos recoja, así que vuelve a la civilización (término ambigüo para referirse a El Cairo) que en el desierto no me veo yo pasando la noche, debe haber mucho bicho.

Para terminar el viaje súbete a la Torre de El Cairo para que te cobren 10 veces el precio que pone en la entrada para los egipcios. Desde sus 187 metros las vistas son excepcionales. Desde cualquier parte del mirador la ciudad es interminable, caótica, desordenada...brutal.

Egipto no cabe en tres post, pero aquí se acaba un viaje genial por un país fascinante, con un pasado esplendoroso pero con un presente bastante menos brillante. Un legado que debería estar más cuidado, riquezas incalculables, suciedad crónica, tesoros artísticos envidiables, edificios inacabados cuyos palomares están más logrados que las viviendas, joyas impresionantes de civilizaciones pioneras en casi todo, conductas incívicas totalmente asentadas y normalizadas. Todo eso es Egipto.  Hace miles de años Egipto era la civilización más avanzada del mundo, a ellos les debemos aportaciones imprescindibles en matemáticas, medicina, arquitectura, astronomía...su civilización contribuyó de manera sobresaliente al desarrollo humano. Sin remontarnos tanto tiempo: hace 25 años las mujeres egipcias se bañaban con libertad en las playas, hoy las pocas que lo hacen llevan burkini. Las sociedades no siempre evolucionan, tengamos cuidado con la nuestra, los faraones acechan por todos lados. Sus momias, digo. Ha sido un viaje impresionante, nos vemos en el próximo !!!


Forman parte de este viaje: 

- Egipto I, Aswan, Kom Ombo, Iduf
- Egipto II, Lúxor.
- Egipto III, El Cairo

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