Si la bacteria del Nilo se manifiesta en el vuelo de Luxor a El Cairo no se te van a hacer corto los 50 minutos de trayecto en avión. Y menos casi las dos horas entre el aeropuerto y el hotel. Sí, dos horas de retenciones y bocinazos en esta megaurbe de 22 millones de almas, sin apenas semáforos.
Podría seguir por lo escatológico porque el final no tiene desperdicio (bueno sí, muchos) pero voy a ser considerado y te voy a llevar a las Pirámides de Giza para que veas que la estupidez humana viene de lejos. Claro que la culpa la tienen los dioses que les tenían sorbiditos el cerebro a todo el personal y obligaban a enterrarse con su ajuar funerario para abrir la última puerta que les llevaría a la eternidad, y, claro, en un nicho solo cabe calderilla. Quizás algún faraón hubiese preferido incineración, pero como los tanatorios de la época no ofertaban tal posibilidad los pobres faraones tuvieron que hacerse estas pirámides y guardar en ellas todos sus tesoros para que después la saquearan.
Podría seguir por lo escatológico porque el final no tiene desperdicio (bueno sí, muchos) pero voy a ser considerado y te voy a llevar a las Pirámides de Giza para que veas que la estupidez humana viene de lejos. Claro que la culpa la tienen los dioses que les tenían sorbiditos el cerebro a todo el personal y obligaban a enterrarse con su ajuar funerario para abrir la última puerta que les llevaría a la eternidad, y, claro, en un nicho solo cabe calderilla. Quizás algún faraón hubiese preferido incineración, pero como los tanatorios de la época no ofertaban tal posibilidad los pobres faraones tuvieron que hacerse estas pirámides y guardar en ellas todos sus tesoros para que después la saquearan.